Click acá para ir directamente al contenido

Investigador de U. Autónoma participó en estudio donde se logró reducir el impulso de beber alcohol en un laboratorio

  • Martes 2 de agosto de 2022
  • 09:50 hrs
Foto referencial

Foto referencial

Una molécula sintetizada permite reducir el consumo de etanol a largo plazo en ratas bebedoras.

Se estima que el alcoholismo mata a 3 millones de personas a nivel mundial, mientras que en Chile es responsable de alrededor de 9 mil muertes al año. De ahí la relevancia de estudiar mecanismos que permitan disminuir el consumo.   

Como explica el Dr. Juan Pablo González, investigador de la Universidad Autónoma de Chile en Talca, «es la liberación de dopamina en el cerebro la responsable de la sensación de placer y bienestar al consumir drogas de abuso como la nicotina, cocaína e incluso al comer chocolate».

Es sobre esta sensación de recompensa que un grupo de investigadores está trabajando para dilucidar la ruta que promueve la adicción al alcohol. La publicación en Biomedicines, muestra que al administrar una molécula sintetizada (UFR2709) se retrasar el impulso por beber etanol a largo plazo, previniendo su ingesta excesiva. En trabajos anteriores lo habían demostrado a corto plazo (17 días).   

Específicamente en la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, en el laboratorio del Dr. Mario Rivera, se realizaron experimentos con ratas modificadas genéticamente (ratas bebedoras UChB, provenientes de Facultad de Medicina de esa casa de estudios superiores) que mantienen el impulso por buscar beber etanol en exceso, a las que se les administró el compuesto. 

«Nuestros resultados muestran que reduce el comportamiento de búsqueda y la ingesta de etanol, incluso cuando se detuvo la administración del fármaco, e indujo una reducción en la ingesta total de etanol de alrededor del 55 %», comentó el investigador de la Universidad Autónoma de Chile.

Estos hallazgos sugieren que el bloqueo de los receptores nicotínicos cerebrales, que es lo que produce esta molécula, inhibe el comportamiento de búsqueda e ingestión de etanol, y que este fármaco podría detener la necesidad impulsiva/genéticamente adaptada de la ingestión.

«Respaldan aún más la opinión de que los receptores nicotínicos están implicados en la regulación de la ingesta de alcohol y que el bloqueo de estos receptores reduce la necesidad instintiva de la ingesta. Se necesitan más estudios para comprender el mecanismo molecular y bioquímico involucrado en el alcoholismo», señaló el estudio.        

En este sentido, el investigador de la Universidad Autónoma de Chile es enfático en señalar que «es muy temprano para hablar de un medicamento para detener el alcoholismo. De todas maneras, esperamos seguir realizando experimentos con este compuesto y encontrar la forma de mejorar su acción en el consumo».